1 de enero – Santa María Madre de Dios

María es nuestro modelo para convertirnos en artífices de la paz

Desde en 1968, por iniciativa del papa Pablo VI, el 1 de enero se dedica a la oración por la paz en el mundo. Ante todo, se pide el silencio de las armas y que el dinero de la guerra sea dado a los más pobres. También se trata de hacer la paz en nuestras relaciones personales, cuidando de mantener la unión sin querer tener la razón a toda costa.

Al asociar a la Madre de Dios a la oración por la paz en este día, se nos ofrece una primera clave para vivir sanas relaciones entre nosotros todo el año. María es un modelo a seguir que nos invita a rezar para convertirnos en “artífices de la paz”. Las actitudes correctas se implantan fácilmente y los frutos se dan cuando entramos en un camino de humildad, donde lo que cuenta es esencialmente el trabajo del corazón, la docilidad al Espíritu Santo y la lucha contra el activismo.

A principios de año, nos llamó la atención un librito pensado para vivir una segunda clave y tener paz: Vivir nuestras relaciones en paz del padre Paul Dollié. El autor nos lleva a escuchar lo que se dice en el interior de las parroquias, de los presbiterios y de nuestras casas para mostrarnos cómo, entre cristianos, sin quererlo, tomamos el camino de la guerra antes que el de la paz.

Con humor da muchas claves para las relaciones humanas, como la gestión de conflictos, el origen de los chismes o la relación utilitaria con las personas. Nos llamó la atención un consejo relacionado con la cultura del “feedback”, que consiste en tener valor para pedir a otro, siguiendo unas determinadas reglas, una palabra de verdad sobre nuestro trabajo, nuestra vida, nuestras opiniones... Es una práctica muy simple, pero que podría transformar nuestro año si pudiéramos hacerla.

Equipo de redacción de Marie de Nazareth

 

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