25 mayo - Francia. Aix en Provence. N. S. del Mar

¿Quién eres Tú, Soberana?

¿Quién eres Tú, Soberana? ¿Quién eres Tú, Inmaculada? No logro profundizar lo que significa ser criatura de Dios. Inmaculada... vengo a Ti con una humilde oración: Déjame alabarte, Virgen santísima... Cómo comprender y expresar lo que para Ti y en Ti Dios ha previsto. Inmaculada, Reina del cielo y de la tierra, sé que no soy digno de acercarme a Ti, de caer de rodillas e inclinarme ante Ti, pero como Te amo tanto, me permito pedirte, a Ti que eres tan buena, que me digas quién eres, pues deseo conocerte cada vez más y amarte cada día con mayor fervor. Déjame alabarte, Virgen santísima... Permíteme glorificarte con mi sacrificio. Acuérdame vivir, trabajar, sufrir, consumirme y morir por Ti!

Suscribirse es fácil (y también darse de baja).
No lo dudes: suscríbete hoy. ¡Es gratuito!